El Patrimonio Público como Negocio eclesiástico: La Iglesia Católica y su Lógica Empresarial en las Columnas de Osvaldo Bayer
Introducción
La Iglesia Católica atraviesa una crisis profunda y multidimensional que va más allá de su dimensión espiritual. En distintos países, pero especialmente en Europa y América Latina, enfrenta una acelerada pérdida de fieles activos, una reducción drástica en el número de sacerdotes y capellanes, y una caída significativa en los ingresos que tradicionalmente sostenían su estructura. Esta crisis de vocaciones y de arraigo comunitario ha debilitado su capacidad de autofinanciamiento a través del aporte voluntario de los creyentes. Ante ello, ñla Iglesia Católica se lanzó a nuevos mecanismos de subsistencia que van desde el respaldo estatal hasta la mercantilización directa del vasto patrimonio público que con diferentes fórmulas legales y convencionales, administraban en conjunto con las comunidades respectivas. En este contexto, adoptando una lógica empresarial, la Iglesia ha devenido en una auténtica corporación, convirtiéndose en una de las principales propietarias de bienes inmuebles y generando ingresos a partir de transacciones comerciales, muchas veces en colisión con el interés público. Esta degradación institucional, marcada no solo por su crisis económica sino también por los escándalos de abusos y corrupción, ha sido objeto de análisis en las columnas de Osvaldo Bayer, quien, con su inconfundible tono crítico, desentrañó la transformación de la Iglesia de institución religiosa a corporación económica.
Osvaldo Bayer (1927-2018) fue un historiador, periodista y escritor argentino cuya obra se caracterizó por un compromiso inquebrantable con la memoria, la justicia social y la denuncia de los abusos de poder. Desde una perspectiva libertaria, dedicó su vida a investigar y revelar aspectos ocultos de la historia argentina y mundial, con un especial énfasis en la lucha contra la impunidad. Sus investigaciones sobre la Patagonia Rebelde, la violencia estatal y la apropiación de bienes públicos lo convirtieron en una de las voces más críticas e influyentes del periodismo argentino.
Uno de los espacios donde Bayer plasmó su pensamiento fue su columna en el diario Página/12, donde a lo largo de los años analizó temas históricos y de actualidad con una mirada profundamente crítica. Desde estas páginas, expuso las contradicciones del poder, denunciando la violencia institucional y el dominio económico de sectores privilegiados, entre ellos la Iglesia Católica. Con un estilo mordaz y documentado, sus columnas sirvieron como un ejercicio de memoria y resistencia frente a las estructuras de dominación.
Esta selección de artículos se centra en un aspecto menos explorado, pero crucial: el manejo económico de la Iglesia Católica, especialmente en Alemania y Argentina. A través de sus textos, Bayer expone la conversión del patrimonio eclesiástico en un negocio, mostrando cómo la Iglesia ha actuado no solo como una entidad religiosa, sino también como una poderosa corporación con intereses económicos. Estas reflexiones permiten entender los mecanismos de mercantilización del patrimonio, los privilegios fiscales y el modo en que la institución ha acumulado y administrado sus bienes en distintos contextos históricos. En un mundo donde el poder económico de las instituciones religiosas sigue siendo un tema opaco, estas columnas contribuyen a la reflexión sobre el rol de la Iglesia en la economía y la sociedad.
A continuación se presenta un listado de columnas escritas por Osvaldo Bayer en Página/12 que abordan temas relacionados con la Iglesia Católica, especialmente en Alemania[1]. Cada entrada incluye el título, la fecha de publicación y el enlace correspondiente:
un listado exhaustivo de las columnas de Osvaldo Bayer en Página/12 que abordan temas relacionados con la Iglesia Católica, su manejo patrimonial y otras cuestiones éticas y morales:
“Pido perdón” (2 de septiembre de 2000): Bayer analiza cómo la Iglesia Católica alemana utilizó trabajadores esclavizados durante el régimen nazi y la posterior indemnización que se vio obligada a pagar.
“Inocencio y Woitila” (27 de mayo de 2000): Reflexiona sobre la crisis interna de la Iglesia Católica alemana, abordando temas como el celibato sacerdotal, la prohibición del sacerdocio femenino y la actitud del Vaticano frente a estos debates.
“El decoro y la luz” (23 de diciembre de 2000): Bayer critica la falta de acción de la jerarquía católica argentina en relación con los presos de La Tablada, contrastándola con la postura de otras figuras religiosas.
“Ultima ratio” (27 de octubre de 2001): Discute el concepto de “última ratio” en conflictos bélicos y critica la postura de las iglesias, incluyendo la Católica, ante situaciones de guerra y violencia.
“La verdad salió a la luz” (13 de febrero de 2010): Expone los casos de abuso sexual cometidos por sacerdotes en Alemania y otros países, y critica la falta de transparencia y autocrítica de la Iglesia Católica.
“La espalda de los católicos” (9 de noviembre de 2013): Aborda la creciente desvinculación de los fieles alemanes de la Iglesia Católica, destacando casos como el del obispo de Limburgo, Franz-Peter Tebartz von Elst, conocido como el “obispo del lujo” por sus gastos excesivos.
“Pagar los pecados” (4 de enero de 2014): Informa sobre las indemnizaciones que la Iglesia Católica alemana ha comenzado a pagar a las víctimas de abusos sexuales cometidos por sacerdotes, y critica la falta de acciones más profundas para abordar el problema.
“La Iglesia y sus dineros” (28 de febrero de 2015): Expone la considerable riqueza acumulada por la Iglesia Católica, centrándose en el caso del Obispado de Colonia en Alemania, y analiza la crisis de la institución en Europa.
Estas columnas ofrecen una visión crítica y profunda sobre las acciones y políticas de la Iglesia Católica, especialmente en el contexto alemán, y reflejan el compromiso de Bayer con la verdad y la justicia.
[1] En Alemania, existe un impuesto eclesiástico (Kirchensteuer) que se aplica a los miembros de ciertas comunidades religiosas reconocidas como corporaciones de derecho público, como la Iglesia Católica y la Iglesia Evangélica. Este impuesto se establece en el Artículo 137, Sección 6, de la Constitución de Weimar de 1919, que, a través del Artículo 140 de la Ley Fundamental alemana (Grundgesetz), sigue vigente en la actualidad. Dicha normativa establece: “Las comunidades religiosas que sean corporaciones de derecho público tienen derecho a recaudar impuestos sobre la base de las listas de impuestos civiles de acuerdo con las disposiciones de la legislación estatal” (omnesmag.com). La tasa del impuesto eclesiástico varía según el estado federal (Bundesland), siendo generalmente del 8% o 9% del impuesto sobre la renta (Einkommensteuer). Esto significa que el porcentaje se calcula sobre el impuesto a la renta adeudado, no directamente sobre el salario o las ganancias totales. Por ejemplo, si una persona debe pagar 5.000 euros en concepto de impuesto sobre la renta y reside en un estado con una tasa del 9%, el impuesto eclesiástico sería de 450 euros anuales (hispaleman.de). Al registrarse en Alemania, los ciudadanos deben declarar su afiliación religiosa. Aquellos que pertenecen a una comunidad religiosa sujeta al impuesto eclesiástico están obligados a pagarlo. Sin embargo, es posible renunciar formalmente a la membresía de la iglesia mediante un proceso conocido como “Kirchenaustritt”, lo que exime al individuo de este impuesto (oficinaprecariaberlin.org). Este sistema es una particularidad del modelo alemán de relaciones entre el Estado y las iglesias, y no se encuentra en muchos otros países.
